domingo, 7 de abril de 2013

"Los límites de la ambición"


Ávidos y cegados por la sed
de darle cuerda a su mejor juguete
lo rompieron forzándolo a merced,
poniéndonos a todos en un brete.

Ahora estamos frente a la pared,
atados como reos al grillete
mientras ellos se enredan en su red
clavando por doquier el estilete.

Unos más y otros menos, pagaremos
por los desórdenes y la ambición
de poder de un montón de desalmados

pero puede que al fin nos alegremos,
pese al dolor que causa la agresión,
si salen a la luz sus entramados


y acaban relegados
y en el lugar que por su acción merecen
si jueces y justicia prevalecen.

Alma en el verso

3 comentarios:

matrioska_verde dijo...

la justicia no prevalece

siempre son ajusticiados los mismos, los que no tienen dinero para pagarse caros abogados

y al final volverán a ganar los mismo, aunque a mí me resulte incomprensible.

porque los gritelles me aprietan cada vez más.

yo lo digo así, a lo bruto, tú lo versificas con gracia y estilo.

biquiños,

Cristino dijo...

Certero soneto "dedicado" a la corrupción, que se ha ido agrandando, ante la impunidad de que gozan los políticos y jueces, que éstos no se quedan a la zaga.
Dudo que se limpie todo y paguen sus culpas con los castigos que sin duda merecen, pero no caerá esa breva.
Felicidades y abrazos.

Alma en el verso dijo...

Muchas gracias